Phen

sus plumas

que devoran mi ansiedad,

su vuelo firme

con la mirada perdida,

que cohartan mi retraso.

su, siempre frágil,

esperanza de llegar.

del polvo vienes...

y en polvo te convertirás.

Tan grato es su recuerdo

que quisiera que fuera un cuento,

como lo que solia contarme,

para no tener miedo.

Expiración

Pura sombra
el blanco, negro y gris
En la espuma
de la nube que imagina
mientras la ve pasar.
Con unos ojos que hablan
y esa voz que dice poco.

Después de todo,
Sabe que te va a ganar.

*** Es lindo saberlo ***

Es una tinta invisible
¿como pretende usted?
ante todo ciega y sorda
tampoco le podre oir
el viento, dice?
yo diria más bien pura paz
el tiempo, dice?
pensaría que da igual ...
LA REALIDAD EN SU MAXIMA EXPRESION?
Ah...
Eso sí que duele.

Me bajo.
Comprendí.

Tantos cantos 
cuentan cuentos,
Cuantos “tanto”
tientan tontos,
mientras mienten
muestran metas;
fines finos 
y caretas

**
y yo… 
yo creo que creo en lo que creo
aunque no quiera creer
ni quiera querer lo que quiero

**

penas posan,

pesan, pisan...

¿pasan?

Quiere ceder
Y no le piden
Quiere pelea
obtiene tregua
Quiere caer 
Y la protegen

Y cito a la más grande:
Quebrar. Romper.
Rasgar. Dividir.
Sinónimos
de lo que nunca harás.


Y es la corriente 
un “debo hacerlo”
y nada más…

Por las noches 
se hacía escuchar
haciendo eco.
Aquel silencio,
la quietud
y el hastío 
se hicieron uno sólo, 
palideciendo 
paso a paso
por el polvo 
que sobre ese espacio
se mezclaba
con sí mismo.
Pisadas sin huella
de un caminante
queriendo escapar
a ningún lado,
intentando
resolver,
revolver,
reponer.

El silencio es nuestro.
Tuyo y mío.
Un polizón
que no pide permiso,
ni disculpas,
ni razón.

Pocos recuerdos.

Húmedo y empañado.

Casi invisible.

Azul fue siempre su color preferido.

De viajes entre el lápiz y el papel.

Hoy es ausencia y legado.

Siesta

Durmiendo en un sofá sin dueño
Esperaba ella una respuesta
Soñando que el respiro que bien merecido tenía
llegaría con la siesta.
Rondando los bares
visitando los vasos llenos de nada
escuchando una y otra vez
el eco que repite solo una pavada.
Qué distinto el merecer,
El tener que tener por tener
A la vida que le dice
“No podes llegar sin correr.”
En el sueño ella soñaba
soñaba que iba a llegar
soñaba que cada tanto,
cada tanto ella llegaba.

A la Borra... de un café

Las huellas son marcas
A las marcas las borra el tiempo
Le guste, o no…
A la borra de mi café

Solitario y sin resguardo
En aquel mundo infiel
Sale de la fila
Silbidos sordos y
Luces de neon
Lamentos, llantos y gritos
No hay luz ni sombra
No hay resto 
No hay obra
El oasis no ilumina
Tan lejano y desahuciado  
Tenso, roto, 
Resquebrajado y sin usar
Tan frágil 

Ignorante de lo que es
Ciego y viendolo al reves

Penelope y Helena

Luchar incesantemente contra un obstáculo

que me impide hacer algo que juzgo necesario o conveniente,

aceptar con rabia la derrota

y finalmente,

un tiempo después,

comprobar que el destino tenía razón. 

E. Sábato "El túnel"